Correlimos Tridáctilo

Calidris alba

 

El Correlimos Tridáctilo, Calidris alba, es un pequeño limícolo fácil de identificar, pues a sus hábitos solitarios aún en los pasos de primavera y otoño, une un plumaje muy claro. En primavera el dorso es acastañado rojizo y en el otoño e invierno gris muy pálido. Sus partes inferiores son blancas y las patas y el pico negros. Posee actitudes inconfundibles. A su hábito solitario, que ya se ha señalado, hay que añadir que se le observa sobre todo en las orillas de las playas, en especial si éstas tienen la arena muy fina. Frecuenta arenales en el interior de estuarios y corre con rapidez detrás de las olas recogiendo pequeños dípteros y crustáceos que se mueven con el flujo y reflujo. Su área de cría es circumpolar, ocupando las islas de Spitzbergen, Nueva Zembla y hasta el Este de Groenlandia. Altamente migrador, virtualmente es cosmopolita en invierno. Moreau (1972) lo señala como invernante en el lago Tchad (Nigeria y Tchad), lago Victoria (Tanganika y Uganda) y lago Nyasa (Malawi), lo que supone vuelos a través de los continentes para alcanzar estas aguas interiores. En Iberia las capturas incluyen Tridáctilos anillados al paso por el sur de Noruega, recuperándose en Asturias, costas atlánticas de Portugal, una en Valencia y otra en Madrid (Bernis, 1966). Casi todas a finales de otoño. Los invernantes en la Península son escasos, aunque no es ave fácil de observar en zonas extensas de playas y marismas costeras. En el censo de 1973 solamente 181 tridáctilos se contaron en las costas españolas. La mayoría en Andalucía (Cádiz sobre todo). El resto en Levante y Cataluña y únicamente dos individuos en Galicia. Portugal también dio cifras muy exiguas en el invierno de 1968-69; se observaron solamente once Tridáctilos.

Recientemente se consignan bastantes avistamientos de invernantes en el interior peninsular, así como una concentración de 306 ejemplares en las salinas de Tenefé (Santa Lucía) Gran Canaria el 27 de enero del año 2004.